Vicios de Refracción

Miopía o cortos de vista

Es una enfermedad hereditaria o genética que consiste en que las imágenes no hacen foco sobre la retina. Debido a un mayor poder de los lentes oculares (córnea y cristalino) o a una mayor longitud del ojo, los rayos visuales hacen foco por delante de la retina, produciéndose así una imagen borrosa al mirar de lejos (por eso se les llama cortos de vista). Sin embargo, los pacientes miopes son capaces de ver nítidamente objetos cercanos (a 30 centímetros o menos de sus ojos). Esta habilidad para ver de cerca la mantienen durante toda su vida por lo que cuando les llega la presbicia (incapacidad de ver objetos cercanos) ellos no se ven afectados y pueden continuar leyendo sin lentes como lo hacían cuando eran más jóvenes.

La miopía es una de las principales causas de consulta por lentes en gente joven y su prevalencia va en aumento. Se inicia en la niñez y debería detenerse al rededor de los 20 años. Interesantemente se ha visto que exponer a los niños desde edades tempranas al aire libre y a actividades bajo el sol, es un factor protector para detener el avance de la miopía.

Su tratamiento puede ser con lentes ópticos, lentes de contacto o cirugía refractiva, obteniéndose muy buenos resultados con esta última técnica.

Figura 1. Izquierda: simulación de cómo ve una persona con miopía sin lentes y a través de sus anteojos los cuales tienen a achicar las imágenes. Derecha superior: esquema de un ojo miope. Los rayos de luz que ingresan convergen y hacen foco antes de la retina. Derecha abajo: al corregir con lentes los rayos logran hacer foco en la retina.

Astigmatismo

Es la enfermedad refractiva más frecuente. Al igual que todos los vicios de refracción es hereditario o genético y consiste en que las imágenes hacen foco en diferentes puntos de la retina. Esto es producido por una irregularidad en la forma de la córnea, el principal lente del ojo. Las imágenes se ven borrosas o como con fantasmas lo que dificulta distinguir detalles a cualquier distancia en que se mire. Incluso hay pacientes que relatan ver doble las imágenes. Puede producir dolor de cabeza cuando es de magnitud considerable y no se trata.

Se presenta desde la edad escolar generalmente y hay que estar alerta en niños o jóvenes que tienen una progresión rápida del astigmatismo ya que pudiéramos estar en presencia de un queratocono.(link)

El tratamiento del astigmatismo puede ser con lentes ópticos, lentes de contacto o cirugía refractiva, obteniéndose muy buenos resultados con esta última técnica.

Figura 2. Izquierda: simulación de cómo ve un paciente con astigmatismo. Derecha superior: esquema de un ojo normal en donde los rayos de luz hacen foco en la retina y la imagen de la letra A se ve nítida. Derecha abajo: esquema de un ojo con astigmatismo en donde los rayos de luz hacen foco en diferentes partes de la retina lo que genera una imagen A poco nítida.

Hipermetropía

Se produce debido a un menor poder de los lentes oculares (córnea y cristalino) o a una menor longitud del ojo, lo que genera que los rayos visuales hagan foco por detrás de la retina, produciéndose así una imagen borrosa al enfocar en todas las distancias.

Cuando es de baja magnitud generalmente el ojo puede compensarla acomodando (enfocando de cerca) por lo que la mayoría de los hipermétropes presentan síntomas una vez que les llega la presbicia, esto es, la incapacidad de acomodar. Sin embargo los niños hipermétropes pueden tener asociado un estrabismo en el cual sus ojos se desvíen hacia la nariz.

El tratamiento de la hipermetropía puede ser con lentes ópticos, lentes de contacto o cirugía refractiva, observándose una importante tasa de regresión de la hipermetropía en estos pacientes, por lo que en mayores de 50 años tiene mejor resultado la cirugía facorefractiva, que consiste en el reemplazo del cristalino por un lente intraocular.

Presbicia

La presbicia consiste en la dificultad para ver objetos cercanos, esto es, a menos de un metro de distancia. Comienza habitualmente desde los 45 años y es progresiva, o sea va aumentando, hasta los 60 años en la mayoría de las personas. Su avance significa que cada vez cueste más leer y ver las letras chicas.

Se produce por un desgaste natural de la capacidad del ojo para enfocar los objetos a corta distancia, por lo que no debería considerarse una enfermedad propiamente tal. En algunos casos la presbicia se acompaña de hipermetropía, por lo que estos pacientes experimentan dificultad para ver de cerca y de lejos, lo que les aparece de manera brusca sobre los 40 años. Los pacientes que son miopes no se ven perjudicados cuando les aparece las presbicia ya que pueden seguir leyendo sin necesidad de sus lentes para lejos o para la miopía, aun cuando para la visión lejana los sigan necesitando. Esto ocurre porque los pacientes miopes tienen su ojo enfocado a corta distancia, a diferencia de los pacientes sin miopía que tienen su foco a larga distancia.

Para tratar la presbicia hay múltiples opciones. La más habitual y sencilla es utilizar lentes de lectura. Estos lentes de lectura se caracterizan por ser con signo + y números que van del 1 al 4 generalmente. Si su oftalmólogo se lo recomendó, usted puede comprar estos lentes de lectura ya hechos, los venden en farmacias, supermercados y librerías, al igual que en otras partes del comercio.

Si además de presbicia usted tiene astigmatismo, hipermetropía o miopía, puede utilizar un lente multifocal, que consiste en un solo anteojo que en su parte superior corrige la visión para lejos (a más de 6 metros de distancia), en su parte intermedia corrige para la visión intermedia (por ejemplo pantalla de computador) y en su parte inferior corrige para la visión cercana (por ejemplo lectura a 30 centímetros de distancia). Los anteojos multifocales son una excelente alternativa para los pacientes, solo debe tener presente que requieren de un periodo de acostumbramiento y de aprendizaje que dura aproximadamente 2 semanas en el cual usted debe aprender a mirar por las diferentes partes del cristal y considerar que si mira por las partes externas del cristal verá una imagen distorsionada.

Si su opción es no usar anteojos, existen también lentes de contacto multifocales, visión monocular o cirugía para la presbicia, siendo hasta ahora la cirugía de reemplazo de cristalino por un lente intraocular multifocal la única opción que le recomiendo a algunos de mis pacientes. La cirugía con láser para la presbicia no  ha demostrado buenos resultados hasta ahora.

La visión monocular es una muy buena alternativa de gran uso en los países anglosajones. Consiste en corregir un ojo para que vea bien de lejos y el otro ojo para que vea bien de cerca. Así usted cuando vea con sus dos ojos abiertos al mismo tiempo, un ojo hará foco a lo lejos y el otro a corta distancia, logrando independizarse completamente de todo tipo de lentes. La corrección se puede realizar con lentes de contacto o cirugía refractiva.

El único inconveniente de esta técnica es que perderá la binocularidad, lo que en realidad no es algo que afecte la vida diaria a no ser que usted sea piloto de avión o una persona que requiere de gran demanda visual. También necesita de un periodo de dos semanas aproximadamente para acostumbrarse.

Figura 3. Izquierda: simulación de cómo ve un paciente con presbicia. Puede ver nítido lo que esta lejos, pero lo que tiene cerca los ve borroso. Derecha: funcionamiento de un cristal multifocal: la parte superior esta diseñada para ver de lejos, la parte central para ver a distancia intermedia como la de los computadores y la parte inferior esta diseñada para enfocar de cerca. Las partes de color rojo hacia los lados de las flechas son las zonas de aberración del cristal, si usted mira por ahí verá todo borroso, en cambio en el centro se encuentra el túnel de visión, el cual se expande hacia arriba y abajo, siendo esta zona por la cual se debe mirar para ver bien.